Es el espécimen de cucaracha más común de encontrar en casas particulares, hoteles, restaurantes y comedores.
En su período de adultez, se caracteriza por poseer una coloración café claro y miden hasta 1,5 cm. Las ninfas de las mismas son semejantes a los adultos, diferenciándose en el tamaño de las alas, las cuales son más pequeñas, y al mismo tiempo presentan un color mucho más oscuro, casi negras.
La hembra es quien lleva la ooteca durante todo el período de gestación. Los huevos se encuentran recubiertos por una membrana muy delgada y de color marrón. Pueden producir hasta 8 ootecas en las cuales se alojan de 30 a 48 embrione. Tienen un periodo de gestación de aproximadamente 28 días, pasando por 6 etapas como ninfas desde que nacen hasta alcanzar la madurez. Los estados ninfales pueden aumentar dependiendo de las condiciones del entorno, o de la eventual pérdida de patas o antenas, las cuales pueden ser regeneradas. Los periodos ninfales pueden alcanzar hasta 120 días, periodo sujeto también a las condiciones ambientales y de alimentación.
Las ninfas pueden salir de la ooteca tanto cuando la hembra es portadora de la misma como cuando se encuentra depositada en algún lugar con alimento y temperaturas adecuadas. En el caso de que la ooteca sea desprendida de la hembra antes de tiempo es muy probable que mueran todos los integrantes de la misma, a no ser que el tiempo sea realmente muy breve y que las condiciones ambientales sean extremadamente húmedas.
Las ninfas y los adultos tienen hábitos muy similares, son más activas por la noche y reposan durante el día, refugiándose en grietas o hendiduras. Prefieren la madera o superficies rugosas antes que el metal o superficies lisas.
La aparición de este espécimen durante el día implica que la población de la misma en ese sector es importante, o bien las condiciones de alimentación no son las mejores.
En etapa adulta pueden llegar a vivir hasta un mes sin beber agua mientras que las ninfas no más de 10 días, al mismo tiempo ambas no soportan más de dos semanas sin alimento. Su dieta está incluye pegamentos, resinas, ropa, cosméticos y especialmente es atraída por alimentos fermentados o restos de bebidas, como ser la cerveza.
Cuando la población es importante, en no más de una semana son capaces de invadir otros lugares, empleando comúnmente las cañerías como vía de invasión. Se las observa generalmente en estructuras cerradas y pasan de un lado a otro por espacios realmente pequeños, es común también, que se trasladen en cajas, bolsas y envases de distinta mercadería.
Prevención
Hoy en día los profesionales hablan de Manejo Integrado de Plagas (MIP) , este se trata de un conjunto de acciones que contempla un uso racional de insecticidas, en combinación con métodos de control físico y saneamiento así como el conocimiento de los individuos plaga, sus hábitos y ciclos de vida, con el objetivo de maximizar el control y minimizar el riesgo. De esta se deja de lado las “pulverizaciones tradicionales” en donde se “empapaba” todo el lugar a tratar con insecticidas tóxicos, muy persistentes y sin ningún cuidado para con la salud de los que vivían o trabajaban dentro de las estructuras.
Los profesionales jamás hablan de exterminio de cucarachas, sino que hablan de control. Esto implica reducir la población del insecto a cantidades que no sobrepasen el umbral de tolerancia establecido para el lugar específico a tratar. La erradicación total es muy difícil de alcanzar.
El MIP consta de una serie de pasos:
1- Identificación: de la especie, su estado de desarrollo y biología.
2- Inspección: Identificación de las fuentes de infestación, alimentación, fuentes de agua, y riesgos ambientales. También se efectúan decisiones de costos, áreas, y elección de herramientas a utilizar acordes a los requerimientos del local, teniendo en cuenta los efectos de los insecticidas o dispositivos hacia a emplear para con las personas, mascotas y el ambiente, incluyendo especies que no sean objeto del tratamiento a realizar.
Estos 2 primeros aspectos son fundamentales en el control de la especie. De ellos depende el éxito del Programa de Manejo Integrado de Cucarachas de Fumigaciones Buenos Aires.
3-Métodos No Químicos:
- Saneamiento o Higiene
- Alteración o Eliminación de refugios
- Modificación del Ambiente
- Exclusión
- Remoción física
- Control Biológico
4-Otros Métodos de control
Métodos Químicos: Insecticidas inorgánicos, Botánicos, Orfanofosforados, Carbamatos, Piretroides, Reguladores de Crecimiento, Cebos, Fumigantes, feromonas, etc, en sus distintas formulaciones y aplicados con distintos procedimientos.
5-Seguimiento: Es muy importante para evitar reinfestaciones que en un futuro ocasionen un aumento poblacional de la plaga.
La comunicación es un aspecto esencial en el Programa de Manejo Integrado de Cucarachas. La información nos dará pautas para tomar medidas para poder corregir desviaciones.
Contrate Empresas habilitadas Profesionales en el Control de Blátidos. No deje su salud o la de sus seres queridos en manos de inexpertos.
Importancia
En experimentos diferentes se encontró que las cucarachas están asociadas con bacterias, virus, hongos, helmintos y protozoos.Se han hallado en condiciones naturales cuarenta especies de bacterias relacionadas con este tipo de cucarachas. Investigaciones demostraron que pueden llevar consigo, ya sea en la superficie de su cuerpo o en el intestino las siguientes bacterias:
Lepra (Mycobacterium leprae)
Peste bubónica (Pasteurella pestis)
Disentería (Shigella alkalescens)
Diarrea infantil (Shigella paradysenteriae)
Infecciones en tracto urinario (Pseudo aeruginosa)
Inflamaciones y absesos (Staphylococcus aureus)
Formación de pus (Staphylococuus spp)
Infecciones urogenitales e intestino (Escherichia coli)
Fiebres entéricas y gastroenteritis (Salmonella schottmuelleri, S. Bredeney y S. oranienburg)
Gastroenteritis (Paracolobactrum aerogenoides, P. Coliforme y Salmonella morbificana)
Infecciones intestinales (Salmonella anatis)
Fiebre tyfoidea (Salmonella typhosa)
Son huéspedes intermedios naturales de 12 especies (Hymenolepis nana, Moniliformis moniliformis, Gonylonemaneoplasticum, Spirura gastrophila y Oxyspirura mansoni).
El segundo grupo más importante de organismos patógenos que transmiten las cucarachas son los helmintos. Siete especies han sido encontradas en el interior de cucarachas y huevos de otras especies han aparecido en las heces. (Shistosoma haematobium, Taenia saginata, Ascaris lumbricoides, Ancylostoma duodenale y Necator americanus.
Las cucarachas pueden adquirir, mantener y excretar ciertos virus. (Coxsackie virus y varias razas de poliomielitis), y se sospecha que pueden contagiar Hepatitis infeccios
Se han reportado 4 especies patógenas de protozoos. (Balathidium coli, Entamoeba histolyca, Giardia Intestinalis, Toxoplasma gondii).
Por contacto con cucarachas se han reportado un sinfín de casos de dermatitis, edemas en los párpados, y otros efectos en diversas partes del cuerpo, es muy común que dicho contacto genere irritaciones y alérgias en personas sensibles a las secreciones de cucarachas.
Las cucarachas han sido identificadas como vectores de alergias en el año 1964 (Berton, H.S) y se las asocia al asma.
Las cucarachas como transmisoras potenciales de enfermedades
El papel de las especies sinantrópicas de cucarachas, es decir, aquellas que conviven con los seres humanos, no es claro aún hoy en día. Existe evidencia de su capacidad de transportar una gran variedad de patógenos tanto enfermedades tanto de asociadas a animales domésticos como del mismo ser humano.
Independientemente de que se comporten como simples transmisores mecánicos o como vectores, siendo las enfermedades diarreicas las asociadas a las cucarachas; una de las principales causa de morbilidad y de mortalidad en toda Latinoamérica. No podemos menospreciar su presencia como un factor importante a controlar si queremos mejorar la salud de los humanos y animales domésticos.
A continuación se detallan los mecanismos de transmisión, principales patógenos aislados, discusión de las evidencias de incriminación de las cucarachas “Periplaneta americana” y “Blatella germánica” como vectoras y algunos de los aspectos importantes de los diferentes mecanismos de control de las mismas.
Introducción
Estudios de Laboratorio han demostrado que en las cucarachas Blatella germánica y Periplaneta americana se encuentran varios agentes infecciosos para el ser humano y los animales, principalmente aquellos causantes de diarreas.
Podríamos decir que las cucarachas representan un peligro latente y real a la población humana, por lo que aunque se le considere un papel potencial como transmisora de enfermedades, el control de cucarachas debería ser incluido entre las medidas de prevención para la diarrea en los textos médicos o en las referencias especializadas, en los que en la mayoría de los casos ni siquiera se las menciona como una posible ruta de transmisión. Algunas personas están tan habituadas a convivir con ellas que ya tampoco las toman en cuenta, e inclusive aún nosotros como controladores, donde el combate de cucarachas y su avistamiento es algo cotidiano, perdemos la dimensión de la importancia sanitaria que esta plaga representa.
Estudios epidemiológicos y entomológicos recientes han demostrado que, tanto moscas como cucarachas, pueden tener un papel importante en la transmisión de las mismas, principalmente en la salmonelosis y en la shigelosis o disentería.
El origen de estas infecciones se relaciona principalmente con niveles bajos de higiene, saneamiento y la contaminación de los alimentos.
Las enfermedades causantes de diarrea son la mayor causa de morbilidad y mortalidad en todo el mundo, se calcula que el número promedio de episodios de diarrea en niños menores de cinco años es de mil millones al año, de los cuales 3% terminan en muerte.
Por esto, una de las principales tareas de Fumigaciones Buenos Aires lograr que usted tome conciencia del peligro que representa la intrusión en su hogar de estos especímenes, y que la primer medida preventiva para evitar su aparición es mantenerse informardo sobre los hábitos del posible intruso para eliminar fuentes de alimentación, y factor que puedan atraerlo hacia su hogar.
La incriminación de las cucarachas como transmisores o vectores de enfermedades
La incriminación de cucarachas como transmisores de enfermedades se ha hecho indirectamente a partir de la relación de los picos estacionales de la abundancia de cucarachas y la prevalencia de enfermedades diarreicas.
Algunas referencias importantes sobre cucarachas de importancia médica son las de Roth y Willis (1957), Cornwel (1968), Guithrie y Tindall (1968) , Hickin (1977) y Ebeling (1975). La evidencia aunque circuntancial es muy fuerte como para justificar programas de control donde peligra la salud humana.
La evidencia más fuerte al respecto es la citada por Roth y Wilis a traves de la siguiente historia.
Herms y Nelson desde 1913 demostraron que la Blatella Germánica puede adquirir bacterias específicas al caminar sobre cultivos de las mismas y después depositar estas bacterias sobre los alimentos, en el caso de este experimento fue sobre la azúcar.
Rueger y Olson (1969), demostraron que las heces de P. Americana infectadas con Salmonella todavía contenían bacterias vivas después de 3 años al ser esparcidas sobre alimentos y vasos, y que al colocar ratones en frascos con pequeñas cantidades de heces infectadas estos también resultaban infectados en el transcurso de tan solo 1 día.
Una experiencia real, anterior a dichos experimentos ocurrió en un hospital pediatrico en Brucelas, Bélgica, donde persistía una epidemia de Salmonella Typhimurium en recién nacidos. Una noche se descubrió que las cucarachas caminaban sobre la ropa, cobijas y cuerpos de los bebes. Se procedió a capturar especímenes y analizarlos. En un número considerable se pudo detectar la existencia de salmonella, por lo que se realizó el control de cucarachas y la epidemia cesó como por arte de magia.
En experimentos de aislamiento de microorganismos, realizados a partir de cucarachas atrapadas en el campo se encontraron varias cepas del virus de la poliomielitis. Cuarenta especies de bacterias patógenas principalmente enterobacterias, la bacteria de la lepra, dos hongos patógenos -Aspergillusun protozoario y Entamoeba histolytica- . Otros organismos que albergan las cucarachas son los virus Coxsackie, de la encefalitis y de la fiebre amarilla los protozoarios como la Tricomonas, Giardia Lamdia y Balantidium Coli todos los cuales producen diarreas o disentería.
Hay un protozoario que merece especial atención y es el Toxoplasma Gondii, causante de la toxoplasmosis. Este es un huésped asociado al gato, y se cree que la cucaracha lo contrae al comer heces infectadas de gato.
Chinchilla y Ruiz demostraron que la Periplaneta Americana fácilmente acepta heces de gato cuando se las alimenta con ellas y Roth y Wilis(1957) hacen un resumen de 7 especies de helmintos patógenos, encontrados en forma natural en cucarachas.
En consecuencia, como se puede observar las cucarachas son capaces de transferir un sinfín de afecciones. La trata inmediata de todo posible foco de infección es necesaria para prevenir futuros problemas de salud, en especial cuidado hay presencia de menores en el local afectado. Por eso ante cualquier inquietud no dude en contactar con una empresa dedicada al control de especies como es el caso de Fumigaciones Buenos Aires.
Las cucarachas como transmisores de agentes patógenos
Las especies llamadas domiciliarias o domésticas (Blatella Germánica y Periplaneta Americana), como se menciono con anterioridad, son sinantrópicas, es decir, han adaptado sus hábitos y costumbres a la convivencia estrecha con el ser humano. Las razones para esta coexistencia son fáciles de entender, tienen suficiente alimento disponible, humedad y escondites.
Tanto adultos como ninfas se alimentan de desperdicios producidos por asentamientos humanos, aunque son omnívoras y se alimentan de gran variedad de material alimenticio le dan preferencia a aquellos que contengan azucares y almidón. Ingieren tanto leche, queso, pasteles, carnes, azúcar, productos de grano y dulces, como así otros materiales no alimenticios como son la cubierta de los libros, plafones del techo con alto contenido de almidón, el forro interior de las suelas de zapato, parientes muertos o heridos, sangre fresca o seca, esputo, excremento, uñas de las manos y de los pies y cadáveres. De hecho ningún alimento que el ser humano pueda ingerir está exento de contaminación por estos insectos. Habitualmente regurgitan a intervalos porciones de su alimento parcialmente digerido y dejan caer heces donde quiera que vayan. También arrojan una secreción nauseabunda por la boca y por las aberturas glandulares del cuerpo, dando un olor persistente y típico de cucaracha, más fuerte en algunas especies como la cucaracha americana.
El comportamiento de las mismas, y sus características corporales, les brinda la capacidad de funcionar como vectores mecánicos de microorganismos patógenos. Sus patas se encuentran cubiertas de vellos y unas especies de espinas con la cual arrastran inmundicias por donde caminan. Otra vía la constituye la ingestión y defecación de patógenos. En este caso el agente infeccioso está protegido mientras se encuentra en el aparato digestivo del insecto y mantenido por períodos mayores que en la ruta anterior, al no haber exposición con el medio ambiente. Muchos de los agentes infecciosos pueden sobrevivir y reproducirse dentro de cucarachas hasta dos semanas después de la exposición a los mismos.
El número de microorganismos transmisores de algún tipo enfermedad en las cucarachas es significativo. Además estos microorganismos se reproducen o multiplican de manera exponencial, lo que permite alcanzar la concentración necesaria para producir la infección en humanos en poco tiempo. La reproducción puede ser no tan rápida en el caso de los virus, pero la dosis infectiva necesaria es baja, con lo cual también las convierte en importantes agentes transmisores de ciertos tipos de virus.
CUCARACHAS Y ALERGIAS
Las cucarachas afectan la salud humana a través de sus exuvias y sus heces, que al secarse contaminan el aire. En pruebas científicas, resultaron más afectados los menores y los pacientes asmáticos; aunque no se establece una relación de si el asma es consecuencia o causa de la reacción de antígenos de cucarachas.
Conclusiones
Las cucarachas son un problema persistente y molesto, la clave para su control radica en la limpieza, esta tarea es más difícil de llevar en lugares en donde hay niños y mascotas y en fábricas. Es importante hacer la inspección para buscar cucarachas, sus nidos y áreas infestadas, la aspersión con un piretroide en hendiduras y grietas sacará a las plaga de sus escondrijos.
Las trampas con cebo también son útiles para detectar infestaciones y monitorear nuestro trabajo.
Es importante limpiar los lugares después de controlada la plaga para quitar la feromona de agregación que ahí se encuentra.
En fin no olvidemos que el manejo integrado de plagas lo deben aplicar controladores profesionales, siempre. Por eso Fumigaciones Buenos Aires está a su disposición para llevar a cabo esta tarea.